Dieter Moor: "Una marioneta en un santuario"
Dieter Moor ha moderado por primera vez el Premio Bachmann en Klagenfurt. Por un lado contempla el acontecimiento como "culto", por otro lado tiene la sensación de haberse "entrometido como una marioneta en un santuario".
"Soy un bicho raro superficial de la televisión"
"Tampoco se puede debatir en serio, si en el entorno exterior no tiene lugar cierta celebridad oficial. Tras la velada de inauguración había algo de agitación, porque yo no lo había hecho con un estilo oficial, sino más bien suelto y relajado, como estoy acostumbrado a hacer como bicho raro superficial y tonto, como hombre de televisión.
Entonces me quedé algo asustado porque cuando el jurado, que es la institución más importante además de los autores, dijo que así no puede funcionar, entonces pensé que el problema era que la marioneta había irrumpido en un santuario al que no pertenece. En ese momento me sentí totalmente desplazado."
El presentador Dieter Moor en una caricatura del dibujante gráfico y artista carintio Wilfried Steurer.
Una experiencia feliz y enriquecedora
Los observadores han opinado, sin embargo, que ha tenido un efecto más vivo de lo que ha sido hasta ahora. Moor: "En condiciones normales me hubiese alegrado de ello, pero ahora ya no estoy tan seguro de si esto le ha perjudicado o le ha beneficiado al Premio Bachmann."
En realidad él era un profano en materia de literatura, subrayó Moor en la entrevista para la ORF. "Yo era más bien como un espectador y cuando la gente que trabaja con textos hace reflexiones sobre ellos, lo diferentes que pueden llegar a ser las reflexiones y lo que hay que considerar cuando se hacen reflexiones y sobre todo lo que uno debe considerar cuando uno se hace reflexiones y cómo se formula esto, realmente fue algo imponente. Ha sido una experiencia enriquecedora y feliz, ha sido genial, he disfrutado mucho."
Con motivo del acontecimiento en el estudio de la ORF en Carintia, Dieter Moor recibió un original firmado de su caricatura.
Se puede gozar de la cultura con seriedad
El Premio Bachmann rompe todas las leyes de la televisión, es considerado por muchos como anacrónico. Los críticos, el público, los editores, los expertos y demás han escuchado durante días enteros las lecturas de los textos y los debates del jurado.
Moor: "Por ello me gusta."
Que sea anacrónico es algo estupendo. Esto podría - de nuevo una palabra prohibida, espero que el jurado no esté escuchando - esto podría 'servir de culto'. Entonces ya sólo lo miraría como espectador. Por una parte tienes algo que rompe todas las leyes de la televisión, pero que a pesar de ello funciona porque tiene vida. Me gustaría demostrar que la seriedad no quiere decir que tengamos un ambiente de cementerio central, sino que se puede disfrutar tomándoselo en serio, como al cocinar o hacer el amor. También el arte puede resultar divertido."
Dieter Moor y Ursula März durante un debate del jurado
¿El bis? Primero hay que dejarlo reposar...
A la pregunta de si el año próximo volvería a hacer de moderador, Moor dijo: "Es una pregunta difícil, porque cuando a una mujer que acaba de tener un niño se le pregunta si quiere otro más, gritará '¡No, ya he tenido suficiente, nunca más!'. Y al cabo de medio año dirá 'bueno, amor mío, ¿qué tal si tenemos un segundo hijo?'. Ahora debo dejar que esto repose, ha sido un experimento el juntar cosas que no van juntas - como este moderador y este acontecimiento. Ya veremos."