El texto "Im roten Meer" de Sudabeh Mohafez ha podido ser escuchado gracias a la invitación de Klaus Nüchtern. Un texto musical, ¿sí o no? - éste es precisamente el aspecto sobre el cual el jurado no se ponía de acuerdo.

¿Texto musical o ritmos desafinados?

El alegato de Nüchtern ha sido muy ambicioso: "Hay que estar sordo como una tapia para no apreciar la musicalidad del texto".

Ijoma Mangold tiene una opinión bien distinta: "Estos ritmos están desafinados".

El primer relato bien concluido

Antes de nada, también Alain Claude Sulzer ha admitido ser un "admirador de los bomberos". Cuenta que a él le ha pasado justo lo que se describe en el texto: el rescate de una casa en llamas. Asegura que puede entender numerosos aspectos de este texto realista, incluso el hecho de "enamorarse espontáneamente" de un bombero. "Es el primer relato bien concluido".

"No hay tonos equivocados" en el lenguaje

Si bien es cierto que Daniela Strigl ha criticado el título  "al estilo periodista" por sonar demasiado intencionado, después ha asegurado que el texto encuentra un lenguaje propio, rítmico para esa "mezcla de situación extrema y cotidianeidad laboral" en la que "no hay tonos equivocados". 

"Sórdidamente ofensivo"

Ijoma Mangold ha objetado: "Tiene algo ofensivo de un modo sórdido: el bombero con su manguera". En este caso las imágenes "se han representado de forma demasiado clara, las metáforas son demasiado firmes" - "Un poco de sal sobre nuestra piel". Desde su punto de vista drástico, el texto resulta incluso malo.

Spinnen ha aportado algunas objeciones

"Bueno, yo me he enamorado perdidamente de la actitud - vale, dentro de un instante estaré muerto, pero observad que soy capaz de pensar", ha replicado el presidente Spinnen. Comenta que esto le resulta familiar porque una vez tres chicos malos le apuntaron con una pistola. Sin embargo, esto ha quedado un poco aislado y se convierte en algo prepotente.

"No me gusta adoptar el papael de Karl Corino, pero a las víctimas de incendios no se las lleva a un centro de acogida para indigentes, sino a un hotel; muy arriesgado para un texto tan realista", ha añadido Spinnen.

Para März la construcción del texto era "sospechosa"

"Aquí se trata de una idea fija, de un intento de narrar a partir de la experiencia de un trauma", comentaba Ursula März. La "construcción del texto" con sus repeticiones mecánicas (diez veces la palabra "dijo" en una página) le ha parecido "sospechosa".

Nüchtern: "Surge el deseo de dejarse llevar"

En este punto el moderador ha preguntado a Klaus Nüchtern si no iba siendo hora ya de que defendiera el texto. "Bueno, si todos se descamisan yo también lo haré" - ha comentado Klaus Nüchtern como "fan de la música jazz" y de esta "muy buena lectura". "¡Hay que escuchar la métrica, los solos, surge el deseo de dejarse llevar!"

Opina que el texto trabaja con ritmos, de ahí sus repeticiones. "Estamos ante un alegato en favor de la ternura de los bomberos que era necesario desde hace tiempo, naturalmente, ¡esto es amor!".

 El texto de Sudabeh Mohafez